Lluvia Creciente – Capítulo 3: Humanidad

Stein. Ese era el nombre del sujeto dueño del diario que James estaba leyendo. Aunque sabía bien que el idioma con el que fue escrito no lo había visto en ningún otro lado, por alguna razón lo entendía muy bien.

Para generalizar un poco, en las primeras páginas del diario el sujeto llamado Stein, escribió su información personal, a excepción de su apellido. Poco a poco a medida que James seguía la lectura comenzaba a dudar de la autenticidad de lo que estaba escrito ya que mencionaba cosas como refiriéndose a sí mismo alguien de la raza de demi-humano y que al momento de empezar a escribir este diario poseía poco más de 200 años. Su trabajo era de explorador, ex-mercenario y maestro samurái. Gran parte de lo que mencionaba parecía sacado de un personaje en una historia de fantasía, pero aún con esas incongruencias James siguió con la lectura debido de lo detallado y serio que parecía en la redacción al leerlo, además de que no tenía nada mejor que hacer mientras estaba descansando.

“Al parecer el lugar donde me encuentro actualmente se llama abismo.”

Durante los primeros meses, Stein estuvo buscando una alternativa para salir de ese lugar, ya que tuvo que causar un derrumbe en la única entrada/salida, debido a una cantidad considerable de criaturas a las que este llamaba bestias demoníacas lo venían siguiendo, pero luego de varios meses de intentos fallidos, al parecer se dio por vencido y prefirió esperar a que lo vinieran a rescatar.

“Pensándolo bien, era de esperarse que se diera por vencido, alguien con incluso una fuerza superior al promedio no habría podido mover esa cantidad de escombros, incluso una piedra del tamaño de una mano pesaba alrededor de 20Kg.”

James se preguntaba qué tipo de mineral seria de lo que están hechas esas paredes para tener semejante peso tan ridículo, incluso tuvo que utilizar su habilidad [Manipulación gravitacional] a plena capacidad para mover la mayor cantidad de escombros posible.

“Pero a pesar del peso que tiene, su dureza no parece diferente al del concreto, es un mineral muy raro.”

Tratando de no pensar demasiado en eso, James recordó que aún no había revisado el resultado en el análisis del traje desde el día anterior. El resultado fue grave tal y como se esperaba, debido a la cantidad de daños recibidos en el combate contra la bestia Behemoth, la mayoría de las funciones de combate y exploración equipadas en el traje se encuentran deshabilitadas, además que el sistema de protección está operando a menos del 20% y el sistema regenerativo no estaba funcionando debido a la poca cantidad de nanomáquinas en el deposito interno. Pero no todo fueron malas noticias, lo bueno a considerar es que el sistema exoesqueleto se encuentra en mejor condición de lo que James esperaba, al igual, la función que bloquea el uso y efecto de habilidades aún permanecía activa, sin mencionar que el sistema de soporte vital indica un funcionamiento a más del 80%, y que el micro-reactor que suministra la energía a todo el traje se encuentra en muy buenas condiciones.

Ya que James inesperadamente se encontraba de mejor humor después de conocer el estado del traje, con expectativa siguió con su lectura.

*-*-*

Después de avanzar varias páginas logro encontrar que el lugar exacto donde se encontraba dentro del abismo, era el piso 81. Era como en las mazmorras de los videojuegos RPG de fantasía, James frunciendo en seño, se sentía cada vez más ridículo por intentar creer lo que leía, no había razón para seguir leyendo ese extraño diario, así que decidió dejarlo por el momento y guardarlo, ya que aun si no tenía mucho sentido, era mejor leer algo que estar sentado sin hacer nada.

Al darse cuenta que empiezo el atardecer, James decido utilizar la casa abandonada como refugio mientras pensaba en una manera de salir que quizás Stein no haya podido considerar, ya sea por falta de recursos o por no tener suficiente fuerza para lograrlo, tenía que haber algo que debió dejar pasar por alto, incluso en la oscuridad de la noche siguió pensando por un rato, pero al darse cuenta que no estaba logrando nada con eso, desistió y prefirió seguir al día siguiente.

“No se me ocurre nada desde hace un buen rato, creo que mañana tendré que intentar usar la fuerza bruta.”

“Ahora que lo pienso, ¿Stein con que se alimentaba para sobrevivir?”

Dentro de la casa, usando la visión nocturna incorporada en el casco de su traje, siguiendo con su lectura del diario, y descubrió que Stein se alimentaba a base de la carne de las bestias demoníacas que derrotaba y de una pequeña diversidad de frutos que se encuentran en una de las zonas del bosque. Respecto al agua, la tomaba de un manantial que se encuentra en una colina al noreste, James tenía la suposición de conocer el lugar al que se refería ya que posiblemente habría pasado por ahí con antelación, por lo que espero no tener muchos inconvenientes con respecto al agua, pero acerca de las supuestas bestias demoníacas, solo podía pensar en que quizás se refería a las bestias que él conocía, sin embargo, no había visto ninguno en los dos días que llevaba en ese lugar.

Más adelante en su lectura, una cosa llamó mucho su atención y fue que Stein mencionaba la aparición de una horda de esas mismas bestias demoníacas por toda la zona al que denominaba como piso 81 en ciertos periodos de tiempo. Fuera verdad o no, James sabía que tendría que estar preparado para cualquier cosa que pudiera ocurrir en los próximos días.

*-*-*

En la mañana del día siguiente, James aun con el traje puesto, se levantó estirando los brazos mientras se sentía lleno de energía, ya que había dormido muy cómodo en la cama de la primera habitación, que tenía un colchón hecho con cuero y algodón, al parecer, Stein con tanto tiempo libre, estuvo construyendo muebles utilizando varios materiales que conseguía en la zona, y muy posiblemente de las bestias demoníacas que mencionó en el diario.

“Bueno, hoy tengo que avanzar en algo para salir de aquí.”

Luego de admirar por un momento el trabajo hecho por Stein al decorar la casa, se dispuso a salir para buscar el desayuno y para su fortuna, mientras iba de camino al bosque se encontró con un gran rio donde vio algunos peces, haciendo que se metiese a pescarlos sin pensarlo dos veces.

Debido a la impermeabilidad del traje, este solo termino mojado en la superficie, sin que James tuviera que tocar una sola gota de agua, eso fue de mucha ayuda ya que, si se hubiera mojado, lo más seguro es que también hubiera bajado su temperatura corporal y habría sido un poco molesto.

Al volver con unos tres pescados en una mano, hizo una fogata cerca de la casa y la encendió utilizando nuevamente el revólver en modo láser de baja potencia. No paso mucho tiempo hasta que los pescados estuvieran listos y comenzara a comerlos con gusto.

Al terminar de comer, James recorrió las afueras de la casa y encontró en la parte posterior un cobertizo con varias herramientas como un hacha, un pico, una pala, un martillo, una segueta entre otros. James se quedó pensativo por un instante y supo lo que debía hacer.

“Mmm, ya sé que voy hacer con esto.”

James agarró la pala y seguido de eso, comenzó a cavar un agujero justo detrás de la casa, la profundidad era aproximadamente un metro y el tamaño trato de que fuera lo más rectangular posible. Una vez listo, sin sentirse cansado en absoluto, dejó la pala a un lado y entró en la casa. Luego de un par de minutos James sale con el cadáver de Stein en sus brazos para colocarlo en el agujero. Una vez ahí, comienza a echar tierra sobre él, hasta quedar enterrado por completo. Para terminar, con algunos trozos de madera que estaban en el cobertizo le hizo una lápida.

Sin duda, James no pensaba en cosas como en ¿por qué apareció en ese lugar? o ¿cómo era posible que un lugar así existiera?, no más se limitó a buscar una forma de salir del abismo y luego preocuparse por lo demás. Ya que por muchas preguntas que tuviera, si no salía de ese lugar, ni siquiera iba a poder encontrar a alguien que se las pudiera responder, pero aun así eso no quería decir que sería indiferente a todo a su alrededor.

James luego de pasar varios años sobreviviendo en un mundo plagado de bestias, cambio completamente su manera de ver las cosas y no fue el único, muchos en la comunidad donde vivía, habían pasado por algo similar a eso, aunque algunos antes que otros, al final todos lograban entender que el mundo que conocían no volvería a ser como antes del incidente y que solo tendrían que resignarse a aceptar el cruel futuro que tenían por delante. Pero aun con el mundo cayéndose en el desastre, no había razón para que ellos dejaran perder su humanidad.


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